El principal atractivo de La Casa del Árbol es un increíble columpio da la bienvenida a los excursionistas a una altura de 2.660 metros. Se invita a cualquiera lo suficientemente atrevido a montarlo.

Aquellos que opten por subirse en el columpio tendrán una perspectiva única del paisaje circundante, que incluye una vista del volcán Tungurahua. Uno sólo puede imaginar la emoción que recorre todo el cuerpo a medida que se balancea hacia adelante y atrás, flotando sobre un gran vació cada pocos segundos. La actividad parece ofrecer una gran descarga de adrenalina dada la construcción del columpio en sí, que parece ser nada más que un tablón de madera que cuelga de dos cuerdas atadas a una barra de metal en lo alto.

Si quieres viajar a este lugar y plasmar tu aventura con fotos, te recomiendo viajar cuando el cielo este despejado y cero neblina. Debes tomar el mismo camino que se toma para llegar al mirador del volcán Tungurahua, sólo que debes avanzar un poco más arriba.

En el siguiente link pueden ver un video que queda registrado a la perfección la tranquilidad y la energía del lugar: La Casa del Arbol